25 de Julio, por Santiago doblan las campanas, tañidos fúnebres que nos mantienen el corazón encogido tras la tristeza que asola España por la tragedia ferroviaria de Santiago de Compostela, un día de celebración que se ha convertido en luto por todas las víctimas y los heridos.
Hasta Aznalcázar nos desplazamos en busca del mismo Santiago, al que rogamos que nos proteja y no permita otra catástrofe igual. Para nosotros se trata de rememorar otros tiempos que ya vivimos, aunque algo lejanos en el tiempo volvemos a repetir las experiencias vividas en esta localidad.
Acercándonos a las 20:00h de la tarde comenzamos un pasacalles junto a la Banda Santa Ana (Dos Hermanas), a ordinario con Salud de San Bernardo, desfilamos por algunas calles de Aznalcázar hasta llegar a la Plaza del Cabildo, desde donde nos encaminamos ya hacia la Iglesia de San Pablo Apóstol para que de comienzo la procesión.
Se abren las puertas de la Iglesia y se escuchan aplausos hacia la Hermandad, que pronto se silencian tras escuchar los primeros acordes de la marcha Costalero que interpretamos mientras comienza a moverse por las naves del Templo el paso de Santiago Apóstol.
El Himno Nacional nos inunda cuando el paso asoma el primer candelabro por la puerta de la Iglesia, y a continuación la Banda de Santa Ana interpreta el Himno de Santiago mientras la imagen comienza a atravesar el dintel de la portada.
Ya en la rampa volvemos a interpretar nuestra música con un clásico y evocador Puente de San Bernardo, que nos lleva hasta la mitad de la cuesta de la Plaza de la Iglesia Santiago, esta vez será el sonido característico de la palillada el que acompañe el paso hasta la calle Las Campanas.
Mi Esperanza y la Mudá suenan mientras recorremos Domingo Manfredi y a cada paso nos sentimos cada vez más acogidos por el público que disfruta de nuestras marchas.
Pero será unos metros más adelante cuando la buena gente de Aznalcázar vuelva a ponernos el vello de punta con el silencio que sigue a la interpretación del Himno de San Antonio con los xilófonos y las flautas a la entrada de la Plaza del Cabildo. Silencio que nos llena de orgullo al comprobar la satisfacción en los semblantes de las personas que abarrotan la plaza.
En la nostalgia, suena Cristo de San Julián para acompañar al paso de Santiago Apóstol en su avanzar bajo los arcos con el emblema de la Cruz de Santiago que adornan la Plaza del Cabildo.
La saeta vuelve a arrancar exclamaciones de agrado que nos hacen sentir como en casa, marcha tras marcha comprobamos también la simbiosis con el cuerpo de Costaleros de Santiago Apóstol, al que desde estas líneas queremos transmitirles nuestra felicitación por el XXX Aniversario de la Cuadrilla, así como a sus Capataces José Ramón Viñuelas y Manuel Bernal.
La procesión sigue avanzando por el centro de Aznalcázar y con el Canon de Pachelbel volvemos a sorprender tanto al público como a los hermanos de la Hermandad de Santiago cuando el paso cruza la Plaza Virgen del Rocío, al que le sigue Virgen de la Hiniesta cuando alcanzamos la Avenida.
Contigo hasta el Cielo a las puertas de la Iglesia de Nuestro Padre Jesús con el paso realizando un saludo a la Hermandad nos trae una hermosa imagen cuando la sombra del paso cubre las blancas paredes del templo creando una bella estampa.
Mientras suena la marcha Santa María Magdalena en la calle de las Campanas recibimos la visita de la Hermana Mayor de la Corporación Doña Josefa Perea García, felicitándonos por nuestro esfuerzo, que no es nada comparado con el recibimiento y el trato que nos dispensaron durante toda la jornada y tanto a ella como a la Hermandad que preside no podemos más que decirles ¡Muchísimas Gracias por todo!
Ya casi a las puertas de la Iglesia, en la penúltima revirá, se encadenan grandes marchas como Dios de Esperanza, Madre y Maestra y la genial Magdalena Bendita de nuestro querido Director D. Manuel Rodríguez Ruiz como colofón a una tarde-noche perfecta en Aznalcázar.
Será el estribillo de Alma de Dios, de nuevo con xilófonos y flautas, el que acompañe el paso de Santiago hasta el dintel del templo y consiga de nuevo el aplauso del público entregado y que ya se dispone a despedir a su Santo Apóstol hasta el próximo año.
Con el Himno de España y el paso ya metido en su Iglesia concluye nuestra procesión y nos despedimos de la Hermandad de Santiago, que aún espera a su Virgen de las Angustias para deleitarse con los últimos instantes antes de que realice su entrada.
La Agrupación Musical Santa María Magdalena quiere agradecer a toda la corporación el trato, el ambiente y sobre todo el disfrute y el gozo que nos hizo vivir el pasado Jueves 25 de Julio, todo un honor el habernos permitido participar en la Procesión de Santiago y deseamos que esto sea un hasta pronto y en breve podamos volver a coincidir. Saludos desde Arahal a todos los que disfrutaron de nuestros sones y agradeceros el buen ambiente que nos envolvió durante todo nuestro paseo por Aznalcázar.
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